¿Por qué?
Actualmente estamos en una situación medioambiental en la que los desequilibrios fisiológicos son sistemáticamente alterados por las técnicas de la agricultura intensiva, de la mala calidad del agua y del aire, del estrés, etc. en este contexto los desequilibrios minerales son habituales y afectan:
Cambios de carácter. Hiperactividad infantil, síndrome premenstrual, la hiperlipemia. Alteraciones del sistema inmunológico. Desde el nino que se resfría continuamente al adulto con riesgo de enfermedades degenerativas. Problemas metabólicos. Desde la gota hasta la artritis, la diabetes,... Problemas de la reproducción. De funcionalidad genital. Ya sea masculina o femenina.
Investigaciones clínicas han demostrado ampliamente la relación entre determinadas concentraciones de minerales tóxicos y ciertos desordenes patológicos como la Fatiga crónica, osteoporosis, anemia... Autismo.
Igualmente se han detectado desequilibrios de minerales en ciertos campos específicos como la intoxicación por mercurio debido a los implantes dentales (Amalgamas), en vacunas y en tratamientos farmacológicos en ciertas patologías y en procesos de quimioterapia.
¿Por qué con cabello?
Porque es fácil de tomar la muestra.
A cualquier hora, de forma rápida e higiénica. Con sólo 0,25 grs. de cabello.
Porque se conserva en el tiempo.
Gracias a las células de tipo matricial que se forman en el folículo del cabello, tienen la capacidad de fijar los oligoelementos esenciales y tóxicos fielmente en el momento actual. Durante la fase de crecimiento estas células están expuestas a un ambiente metabólico interno. En la medida que el cabello crece, 1 cm al mes, hasta salir a la superficie de la piel, las células se endurecen y encierran en su interior los productos metabólicos acumulados durante éste periodo. De esta forma su análisis nos proporciona un test de criba para determinar la situación fisiológica en nuestro organismo de dichos minerales.
El cabello, es por tanto, el medio ideal para conocer nuestras carencias o excesos en oligoelementos tóxicos y esenciales siendo actualmente el MINERALOGRAMA el mejor método para cuantificar dichos elementos en el organismo.